Amenazas a los medios de comunicación y a periodistas
La libertad de opinión y de expresión está considerada como un derecho humano fundamental, reconocido así internacionalmente; a pesar de que en varios países los medios de comunicación y los periodistas se enfrentan a diversas amenazas físicas, digitales y jurídicas. Comúnmente, han sido los regímenes totalitarios quienes han incumplido con sus obligaciones internacionales, no obstante – y es lamentable decirlo – en algunos países democráticos también se han concretado amenazas y acciones contra los medios y contra las personas que laboran en ellos. Las tendencias autoritarias de algunos políticos que –irónicamente- fueron elegidos en sistemas democráticos, derivan en decisiones y posturas contrarias al derecho de la libertad de prensa; muchas veces, motivadas porque la información que se publica la visualizan como una amenaza a su gestión gubernamental.
Este acontecimiento no es un fenómeno nuevo, pero ha cobrado impulso en los últimos años debido a ciertas actitudes autoritarias de políticos que con gran entusiasmo aplauden las verdades que publican los medios de comunicación y que las entienden son favorables para ellos y para sus respectivas gestiones, pero que se enojan y amenazan a la prensa cuando esta publica otras verdades que las consideran desfavorables. Independientemente de los estados de ánimo de los políticos de turno, la libertad de prensa y sobre todo de una prensa objetiva, libre, diversa y pluralista es fundamental para la democracia, porque desempeña un papel vital no solo informando a la ciudadanía, sino también exigiendo que aquellas personas que ocupan cargos públicos rindan cuentas. El ejercicio del periodismo -cuando es imparcial- no debe entenderse como una amenaza para nadie.
Sin embargo, la población debe estar siempre alerta porque las amenazas contra los medios de comunicación en los países democráticos no está totalmente garantizada, tanto es así, que en el informe especial sobre la promoción del derecho a la libertad de opinión del mes de julio del año 2024, la relatora de la ONU, Irene Khan, advirtió -contundentemente- que el espacio para los medios de comunicación independientes y críticos se viene reduciendo en aquellos países democráticos donde están ganando terreno las tendencias autoritarias, situación altamente preocupante puesto que no solo es un hecho que atenta contra la libertad de expresión sino que también ha provocado el cierre de diferentes medios y el exilio de periodistas.
Costa Rica ha sido un país ejemplo en el mundo sobre el tema de la libertad de expresión y prensa, pero la evidencia empírica nos dice que también ha venido experimentando situaciones que amenazan dicha libertad. Por la continuidad de la paz, la libertad y la democracia el país entero debe denunciar cualquier intento contra su libertad de expresión.
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