Pongámosle una sonrisa a Costa Rica

Sí una sonrisa; cuidando donde colocamos las miles de llantas y otros tantos recipientes sin uso, evitamos la multiplicación de la enfermedad del dengue. Pues una llanta y un recipiente expuestos a la interperie en un matorral se llenan de agua. Constituyéndose  en potenciales máquinas de muerte, pues  allí se multiplica el mosquito del dengue.

Si los millones, que habitamos en este país,  cuidáramos  bien, donde  colocamos, cada papel, que no usamos de una envoltura, de un paquete, o de un cartón, estaríamos  cuidando mejor  a Costa Rica entera.

Si al caminar  en las aceras, veredas rurales,  o frente a las escuelas,  colocáramos la basura en un adecuado recipiente, le estamos dándole una sonrisa a Costa Rica y estaríamos dando ejemplo.

El saber educar a nuestros niños y jóvenes, es saberles dar ejemplo, en el manejo correcto de todos los desperdicios, de las aguas residuales, de esta manera  estaríamos dandole otra  sonrisa a Costa Rica. Todo influye en el buen cuido de nuestro país.

Sin embago, la sonrisa se nos apaga en la ciudad de San José. Todos los días, cuando miramos  los montones de  basura acumulada, el desorden con residuos en diferentes esquinas, que  se acumulan, a pesar del eficiente  sistema de recogida de  basura que hace la Municipalidad y que debemos agradecer pero el reguero incontrolado de basura da una pésima calificación a los vecinos,  algunos de los cuales les da por tirar la basura en cualquier lado. Ordenemos a Costa Rica cuidando los pequeños grandes detalles.

El saber cooperar con la sonrisa de Costa Rica, es no botar la basura en cualquier lado , sino que tenemos que  ordenarla, de manera que  el servicio de basura pueda trabajar con más facilidad.

Un delito grave ,es el lanzar  lavadoras, equipo eléctrico a los ríos , pues para ello hay depósitos establecidos,  para entregar el equipo electrónico que no se usa  y cuidar así el medio ambiente de nuestro ríos.

En esta época de vacaciones  en medio de la pandemia  cuidemos las costas y los ríos  que deben permanecer, como tesoro natural para las próximas generaciones.

Todos tenemos  que sumar, en sacarle una sonrisa a Costa Rica, cuidando cada uno, su comportamiento en el combate  de la basura y del desorden. Es una cultura que debe crecer para poder  acabar  con las enfermedades.