Costa Rica y los océanos en Niza. Un aporte científico al azul de los mares
La próxima semana, del 9 al 13 de junio, en la ciudad de Niza, Francia, se celebrará una de las conferencias más importantes del año en materia de conservación marina: la Conferencia Oceanográfica de las Naciones Unidas. En este escenario internacional, Costa Rica se presentará no solo como un participante más, sino como un líder comprometido con la protección de los océanos y el desarrollo sostenible.
Nuestro país, reconocido por su vocación ambiental, llega a esta cita global con una agenda clara: promover la economía azul, reforzar la protección de los ecosistemas marinos y fomentar alianzas internacionales para enfrentar la crisis oceánica.
No es casualidad que Costa Rica sea hoy un referente mundial en conservación marina, gracias a iniciativas como la expansión del Parque Nacional Isla del Coco y la creación de áreas marinas protegidas que cubren más del 30% de nuestras aguas territoriales.
Un llamado urgente por los océanos. Los datos son contundentes y alarmantes. El océano alberga entre 700.000 y 1 millón de especies, pero solo se han descrito alrededor de 226.000. El 95% de este inmenso ecosistema aún no ha sido explorado. Al mismo tiempo, se vierten cada año más de 8 millones de toneladas de plástico, provocando la muerte de más de 100.000 mamíferos marinos y tortugas. La contaminación, la sobrepesca y el cambio climático están empujando a los océanos al límite.
Costa Rica como ejemplo de economía azul. La economía azul —que incluye la pesca sostenible, el turismo marino, la biotecnología y las energías renovables oceánicas— representa el 5% del PIB mundial y da empleo a más de 820 millones de personas. Costa Rica promueve esta visión desde un enfoque sostenible, con políticas que equilibran la conservación y el aprovechamiento responsable de los recursos marinos.
Océanos que alimentan y regulan el clima. El mar es fuente vital de vida. Más de 1.000 millones de personas en el mundo obtienen del océano su principal fuente de proteínas. Además, los océanos absorben el 25% del dióxido de carbono, que emitimos y más del 90% del exceso de calor causado por los gases de efecto invernadero. Sin su función reguladora, el planeta sería mucho menos habitable.
Un liderazgo que inspira. En Niza, Costa Rica reforzará su posición como país promotor de acuerdos ambiciosos para la conservación marina. Nuestro liderazgo se basa no solo en discursos, sino en acciones concretas: áreas marinas protegidas, investigación científica, control pesquero, y el impulso de corredores marinos biológicos como el Pacífico Tropical Oriental.
La conferencia de Niza será una oportunidad para que el mundo escuche una vez más la voz de un país pequeño en tamaño, pero pequeño en tamaño, pero grande en compromiso con el futuro del planeta azul. La esperanza también está en el trabajo marino.
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