Deporte para el desarrollo en el Ministerio de Seguridad
Dijo Nelson Mandela que el deporte tiene la capacidad de cambiar el mundo. Creemos que cuando se enfoca y se dirige de una manera adecuada, el deporte realmente tiene la capacidad de hacer mejor a las personas, y de construir también comunidades con más desarrollo y más convivencia.
La competencia como tal está bien, puede sacar lo mejor de cada persona, puede hacer que las personas den lo mejor que sí. El deporte puede hacer un aporte “plus”, tiene que ver con las poblaciones que participan y los valores que desarrolla.
Las actividades deberán ser inclusivas, buscando incorporar a jóvenes en riesgo de comunidades vulnerables. En ellas son pocas las posibilidades que tiene el Estado, y las actividades deportivas pueden ser una de ellas. Tenemos esa esperanza y esa convicción.
Dijo también Nelson Mandela que el deporte le habla a los jóvenes en un idioma que ellos entienden. Las actividades deportivas los convocan con amplitud, y también a sus familias y sus comunidades. El deporte fortalece lazos comunitarios, y esa cohesión social es algo que necesitamos para tener más seguridad.
El deporte para el desarrollo no convoca a los más fuertes o más rápidos. Convoca a los que más nos necesitan, a los que están más cerca de la droga. Si les ofrecemos deporte, podemos ofrecerles una alternativa, al menos para el buen uso del tiempo libre. Cuando ofrecemos deporte y recreación, disputamos cada uno de los jóvenes costarricenses al crimen organizado.
Dijimos que el deporte hace mejores personas. Eleva su rendimiento físico, mejora su salud e incrementa su calidad de vida. Nos interesa sobre todo la capacidad para desarrollar principios, que consideramos fundamentales para un buen ciudadano. El deporte enseña respeto, disciplina, trabajo en equipo y resiliencia. La capacidad para salir adelante en medio de las dificultades.
Las competencias del Ministerio de Seguridad tienen que ver con el servicio a la comunidad y la prevención de la violencia. El deporte es una herramienta para esos objetivos. Insistimos en priorizar a los jóvenes en riesgo social como población meta, trabajamos con ellos para desarrollar valores y principios.
Nuestro proyecto Ligas Atléticas Policiales es un esfuerzo de prevención de la violencia a través de actividades deportivas. Funciona en 15 cantones del país y participan más de 500 jóvenes en riesgo social. Trabaja con jóvenes entre 12 y 19 años. Impartimos charlas sobre temas como resolución pacífica de conflictos, prevención de violencia, manejo de emociones. Promovemos la coordinación interinstitucional para atender los factores de riesgo de cada joven.
Los facilitadores son policías con estudios en educación física, psicología, trabajo social y otras disciplinas. Alrededor de 70 oficiales que son nuestra esperanza para que se conviertan en modelos a seguir por parte de la juventud. Siguiendo nuestras competencias impulsamos el deporte para el desarrollo con la fuerte convicción de que trabajar con estos jóvenes, es parte de lo mucho que tenemos que hacer para mejorar la seguridad del país.
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