Costa Rica y la contaminación ambiental

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Costa Rica y la contaminación ambiental
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Nuestro país proyecta la imagen al extranjero en torno a la “buena teoría”, que es un país verde, ecológico y amigable con el ambiente.  Del dicho al hecho hay mucho trecho, mucha tela que cortar y lamentablemente se puede calificar hasta como de falaz dicho discurso.

Lo cierto es que Costa Rica no debe contaminar su imagen, no debe contaminar a su población, no debe contaminar el agua, ni la producción agrícola; recientemente, algunos países de la Unión Europea devolvieron productos agrícolas cultivados en nuestro país, contaminados de Clorotalonil hasta en un 16% más de lo permitido.

El uso de Clorotalonil en la agricultura fue prohibido en la Unión Europea, desde el 9 de abril del 2019, después de una revisión realizada por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, EFSA, no pudo excluir la posibilidad de que los productos de degradación del producto químico causen daño al ADN.

EFSA también identificó un alto riesgo para los anfibios y los peces, el Clorotalonil y otros fungicidas están relacionados como factores fuertes en la disminución pronunciada de los abejorros. Algunos reguladores de todo el mundo han asumido falsamente que, es seguro usar pesticidas a escalas industriales.

La ONU hizo hincapié que Costa Rica es uno de los países del mundo que más utiliza en la agricultura químicos sintéticos.  La OCED también ubica a Costa Rica como uno de los países que más usan agroquímicos y pesticidas en la producción agrícola, motivo por el cual ya países de la Unión Europea han devuelto productos.

La pregunta importante de responder por parte de las autoridades del gobierno y las empresas agrícolas cuyos productos fueron rechazados, ¿Cuántas veces puede Costa Rica y su producción agrícola, darse el lujo de que nuestros principales socios comerciales internacionales, devuelvan nuestra producción agrícola, por altos índices de contaminación?

Sin embargo, la contaminación agrícola y al ambiente por Clorotalonil y otros químicos sintéticos, no sólo afecta la imagen de Costa Rica, también envenena a nuestra población y contamina el medio en general, se ha constatado hasta un 1.000% más de lo permitido de pesticidas en algunos productos de consumo local.

Desde1990 el sector agropecuario sufre abandono total por parte de algunas autoridades competentes, no existe asesoría, menos supervisión, lo que desató una nefasta por posiblemente interesada asesoría por parte de algunas empresas comercializadoras de agroquímicos, donde difícilmente no privan sus intereses económicos sobre la seguridad fitosanitaria y ambiental.

La Constitución Política contempla el agua potable, como un consagrado derecho de la población; paradójicamente en Oreamuno de Cartago y muchas otras zonas de Costa Rica, el agua para consumo humano contaminada, mantos acuíferos con tan sólo diez metros de arboleda y la ley exige 200 metros, esto es inaceptable.

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