Agricultura, una actividad vital para cualquier país

En los últimos años hemos visto como los gobiernos manifiestan su apoyo a la agricultura de Costa Rica, sin embargo, eso solo queda en las promesas y palabras, ya que nuestros productores cada día están en peor condición y sumamente desmotivados.

El compromiso con nuestros agricultores debe ser real en sus alcances y objetivos, a partir de políticas públicas claras que den a esta actividad la importancia que merece.

En la mayoría de los países del mundo el apoyo al agricultor es una prioridad y asunto de seguridad nacional.  Las culturas que en el pasado han experimentado grandes hambrunas y necesidades alimentarias, tienen clara la importancia de contar con bases productivas locales, que den seguridad alimentaria y nutricional. Gracias a Dios, en Costa Rica, siempre hemos contado con agricultores valientes y resilientes, que nos han proporcionado el alimento que todos los días nos acompaña en nuestra mesa.

En el caso concreto de Costa Rica, lamentablemente lo que se ha vuelto norma es un desincentivo a la producción agrícola nacional. Aún no hemos logrado como sociedad, encontrar una ruta clara que de real sostenibilidad a los diferentes sectores agropecuarios costarricenses. Siguen los agricultores perdiendo su patrimonio, sus cosechas y el interés por sembrar la tierra, con el enorme riesgo país, de que se pierda ese valioso conocimiento.

El agricultor en Costa Rica ve cómo cambia su entorno día a día, para mal.  Aquella Costa Rica agrícola, de nuestros abuelos, está desapareciendo, para dar cabida a un nuevo entorno regido por los servicios.  Eso no está mal, pero no olvidemos que la agricultura permite encadenamientos productivos en zonas rurales, en donde las oportunidades son cada vez más limitadas.

Apoyar la producción nacional significa crear oportunidades de trabajo en el campo, para así evitar que las familias terminen migrando hacia la gran Área Metropolitana en donde los anillos de pobreza se agrandan cada vez más, generando problemas sociales y de inseguridad para todos los costarricenses.

A los agricultores, lo único que les queda para defender sus derechos y solicitar mejores condiciones, es salir de sus fincas para venir a manifestarse pacíficamente a San José.

Con la esperanza de que sean escuchados hoy se celebra una gran marcha “Por la soberanía alimentaria costarricense”.

El sector agropecuario, una vez más ve la necesidad de manifestarse en las calles de la capital buscando respuestas. ¿Hasta cuándo será necesario que los agricultores sigan haciendo manifestaciones para poder ser escuchados? ¿Hasta cuándo los agricultores costarricenses serán valorados como verdaderos héroes de la patria?

Son personas que incansablemente trabajan el campo para que usted y yo tengamos nuestro plato de comida garantizado en la mesa.