Compañía Nacional de Fuerza y Luz servicio esencial para todos

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Compañía Nacional de Fuerza y Luz servicio esencial para todos
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Desde su nacimiento, la Compañía Nacional de Fuerza y Luz cumple con el mandato de brindar un servicio universal y solidario.  Antes del 8 de abril de 1941. los únicos que tenían derecho de recibir el servicio eléctrico en sus casas o empresas, eran quienes tenían los recursos y les era rentable a las empresas eléctricas vendérselo.

Gracias a la gestión de la Liga Cívica y la anuencia del gobierno de la época eso cambió. Hoy la cobertura eléctrica de la Compañía es del 100% de su área servida. Según los estudios del INEC atendemos el 32% de la población en vulnerabilidad social del país. Nos hemos dado a la tarea de brindarles un servicio seguro y de calidad para bienestar de sus familias.

Estamos en el corazón del país sirviendo a los centros hospitalarios que atienden con esmero y compromiso a las personas afectadas en su salud; -En estos días con más atención y sacrificio a quienes sufren por la pandemia del COVID-19- así como a las industrias y comercio que requieren de calidad y continuidad con estándares de primer mundo.

Conocedores de la calidad de vida que aporta la energía eléctrica, cada día nos comprometemos con la mejora continua para que el sector público y el privado; así como en cada hogar que servimos, para que reciban permanentemente un servicio de calidad.  

Actualmente atendemos el llamado del Poder Ejecutivo para alivianar la presión de los problemas económicos generados producto de la emergencia sanitaria. Además, como política institucional, los clientes residenciales que soliciten arreglos de pago porque que no les es posible cancelar su factura eléctrica; pues han sido cesados de sus trabajos y presenten la documentación que lo respalde, será analizado su record con la Compañía y viabilidad de acuerdo de pago.

Sin embargo, requerimos de la solidaridad de quienes sí pueden atender su pago por el servicio eléctrico. Esto permite que atendamos a las personas que requieren con urgencia este apoyo. Pero, si quienes pueden pagar no lo hacen, impiden que atendamos el mandato, como lo hacemos desde hace 79 años en Fuerza y Luz, de llevar la energía eléctrica a todas las personas que la requieran. 

Nuestro compromiso es robusto e incólume. Quienes trabajamos para la Compañía Nacional de Fuerza y Luz, sin importar la crudeza de la crisis sanitaria, o la condición climática, hemos atendido las labores sin dilaciones, con el objetivo claro de mantener la continuidad del servicio de calidad para todos. Estamos conectados con la realidad que vive el país y el mundo. Sabemos que nuestras tareas son impostergables, pues los hogares, las empresas y por supuesto el sector salud lo requiere para superar esta pandemia. Por ello requerimos de su pago oportuno para continuar haciendo nuestra tarea.

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