Reacción del COLPER ante el pronunciamiento sobre la Sala Constitucional sobre el acoso a periodistas en Casa Presidencial
La reciente resolución de la Sala Constitucional de Costa Rica, que dio con lugar a dos recursos interpuestos por periodistas ante el maltrato recibido en conferencias de prensa del Gobierno, nos recuerda una verdad fundamental: la libertad de prensa no es un privilegio del periodista, sino un derecho de toda la ciudadanía a estar informada.
En cualquier democracia, el trabajo de la prensa es incómodo por naturaleza. Pregunta lo que muchos no se atreven, fiscaliza al poder, cuestiona narrativas oficiales. Pero ese ejercicio es esencial. Cuando se limita o se agrede al periodismo, se restringe la capacidad del pueblo para informarse por vías objetivas, profesionales y plurales.
Escuchemos a Yanancy Noguera Calderón, presidente del Colegio de Periodistas y Profesionales en Comunicación.
En un país como el nuestro, donde nos enorgullecemos de una sólida tradición democrática, no podemos permitir que el irrespeto o el abuso contra la prensa se normalice. Menos aún en el marco de una campaña política, donde la transparencia, el acceso a la información y el
Respetar el trabajo de la prensa —aunque incomode— es honrar la libertad de expresión, un valor que sostiene todas las demás libertades democráticas.
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